El caso de esta librería difiere del anterior. “En mi caso fue un cambio de local, unido a la necesidad de dar un paso adelante en el modelo de gestión. Tuve un contacto con ellos, me explicaron qué suponía estar asociado a su estructura, y allí comenzó nuestra aventura en común”. Garikoitz Plazaola destaca las ventajas que ha observado en su negocio desde que se ha integrado en el proyecto.
“Hay unos compromisos, por supuesto, pero no es una relación cerrada. Me permite desarrollar la tienda en el ámbito que yo considere oportuno. Una central de compras no te da tantas facilidades, y una franquicia por supuesto que tampoco” .Garikoitz insiste en el ahorro de tiempo que ha observado en su negocio.
Todo el tiempo diario y constante que antes empleaba en generar mi propia base de datos, ahora prácticamente no tengo que dedicarlo a ello. Siempre que surge un problema, tengo una asistencia técnica. Y eso me libra tiempo para otros aspectos del negocio, como atender al cliente, centrarme en los productos, ver novedades en libros o nuevas tendencias en papelería… Todo ello mejora la gestión del negocio, así como la atención al cliente. Ya el mero hecho de poder acceder a géneros que antes no tenías, es una gran ventaja respecto a la competencia. Y claro, eso genera flujos, incluso que los clientes habituales puedan consumir otros o más productos”.