Librerías adheridas al programa AMILIBRO

Este programa de colaboración ha sido probado y perfeccionado gracias a la colaboración de libreros profesionales y a su experiencia.

¿Qué es lo que te animó a unirte a este proyecto?

Entre otros motivos, vi muy positivo el no tener que hacer más inversiones más allá del equipo informático. Y, además, me parecía una buena manera de unir fuerzas para luchar porque el libro siga vivo.

¿Cuáles fueron tus frenos iniciales?

Todos los cambios producen miedo, pero llevábamos 24 años con la tienda y sabíamos que podía funcionar. Habíamos trabajado con el grupo desde siempre, conocíamos su forma de funcionar, y eso nos dió garantías a la hora de dar el paso.

¿Encuentras diferencias con otro tipo de modelos de asociación que hay en el mercado?

Sí, mucha diferencia. Principalmente en el trato. En las franquicias, por ejemplo, no suele haber un contacto tan directo, una comunicación tan cercana. Y en este modelo siempre hay opción de consultar o compartir cualquier problema, lo que facilita mucho el día a día.

La gestión es un elemento crucial en el buen fun­cionamiento de las empresas. ¿Has notado cambios con este modelo?

Sin duda. Si tengo cualquier problema, por ejemplo, enseguida me dicen si se puede conseguir lo que haya pedido o no. Antes lo pedía y podía estar un mes esperando, no sabía si estaba descatalogado, si existía… y ahora, al día siguiente ya tengo la contestación. También en productos nuevos, todo son facilidades a la hora de ejecutar mi trabajo como librera.

Todo cambio requiere de tiempo, pero ¿te has sentido acompañada en el proceso?

Claro, siempre me he sentido acompañada. Cada vez que me ha surgido algún contratiempo, he llamado y siempre me han dado una solución. Nunca me he sentido desamparada.

¿Has podido ofrecer servicios añadidos al cliente?

Sí, ahora mismo puedo conseguirles artículos a los que antes no podía acceder; si no estaban en un catálogo me era imposible obtenerlos, y ahora para mis clientes también es una ventaja tener a su alcance todo aquello que necesitan. Ellos mismos me comentan que hemos mejorado mucho, que el mero detalle de recibir un mensaje en el teléfono informándoles de que el libro está en la tienda, les resulta comodísimo. Ahora ofrecemos mejor servicio y mejor imagen.

En esta época de alta competitividad, ¿has podido centrarte más en tus clientes?

Mucho más, antes consumía mucho tiempo y energía buscando productos novedosos, que otros no tuvieran y que llamaran la atención, con el fin de atraer al cliente. Sin embargo, ahora dispongo de más tiempo para estar con los clientes, recomendarles artículos… conozco mejor sus gustos, y todo esto se agradece, claro.

¿La diversificación en productos, ¿te ha ayudado en la captación de nuevos clientes?

Básicamente el que no tengan que estar viniendo a la tienda siete veces a la semana preguntando si ha llegado su pedido; el que reciban automáticamente un mensaje y vengan a por él.

¿Qué servicios son los que más aprecias, y a los que antes no podías acceder?

Sí, la tienda ha cambiado mucho en ese sentido. Ahora puedo ofrecer al cliente mucho más producto y mucha opción de precio. Me ha permitido incorporar en la tienda una zona de papelería mucho más completa, artículos de regalo, juguetes educativos…etc.

Para finalizar, ¿qué balance general realizarías?

Estoy muy contenta, veo que cada vez va todo mejor. El grupo va incorporando nuevas líneas de producto, y para mi comercio es toda una ventaja. Hoy en día te puedo decir que han desaparecido todos mis miedos.